domenica, ottobre 02, 2005

carta de amor

Celébrote a máquina sin más laud que este áspero teclado de la A a la Z, dígote cuánto ámote, del tacón al pelo, esté ese pelo donde esté, en lo alto o en lo secreto de tu fragancia, espérote esperándote. Parado aquí a las 7 bajo el humo del reloj. Y otra cosa: fíjate en las nubes pero sin llorar, donde está escrito casi todo lo blanco y veloz, llámame por teléfono al....
Gonzalo Rojas