giovedì, marzo 30, 2006

Llevo bastante tiempo preguntándome cómo/por qué alguna gente puede ser militante y defensor acérrimo de determinados partidos políticos y defender las patéticas actuaciones de sus líderes tratando de sostenerlas sobre cimientos inexistentes, cuando es más que evidente que se justifican con razones incoherentes que caen por su propio peso.
Me pregunto también si el apoyo al partido responde a un legado afectivo de carácter quizás hereditario, en el que simplemente la persona en cuestión acepta como propio algo que le viene impuesto y no se preocupa mucho por reflexionar acerca de lo que sucede.
Sería quizás más grave –o no- que los afiliados y simpatizantes del partido creyesen ciegamente que su modo de actuar es el correcto. Entonces, quiero creer que es porque realmente se dejan engañar por las técnicas manipulativas de sus dirigentes, que hacen –iba a poner intentan, pero lo más lamentable es que lo consiguen con bastante éxito, vistos los resultados electorales- creer a sus votantes que son un partido serio y que los partidos minoritarios no lo son –tampoco me explico de donde viene esta idea tan arraigada en la mente (por decir algo) de tantos-.
Hay otras personas que no apoyan a ningún partido en concreto –lo cual no me parece bien, sino estupendo, el partido perfecto no existe, y yo pongo en duda que el mejor sistema sea la democracia más agresivamente capitalista- pero ello no debe servir de pretexto para desvincularse por completo de la política, porque entonces qué es lo que te preocupa?
Me da un poco de risa –en realidad no me hace ni pizca de gracia- ver algún patético intento de preocupación por la voluntad del pueblo, cuando por ej. piden un referéndum para la legitimación del proceso de reforma del estatut (palabra prohibida, si la mezclamos con archivo y con alto al fuego y las enviamos todas a la papelera de reciclaje perdemos toda la información almacenada en las hemerotecas del país de 2006), cuando no se ha caracterizado nunca por contar con la opinión pública.
Qué criterios se siguen y sobre qué principios se fundamentan las decisiones de la gente a la hora de escoger la papeleta que van a introducir en la urna?
Inquietante…

mercoledì, marzo 29, 2006


Fuori piove e le mie viscere chiedono acqua per spegnere la sete.
Da lontano si ascolta Leonard Cohen urlando Loves call you by your name.
Sulla tavola ci sono troppe cose.
Non voglio parlare con nessuno, non voglio essere disturbata oggi. Rimanerò qua di nascosto finchè finisca questo momento oppure finchè il mio cadavere sia scoperto.
Meritava la pena, tutto, specialmente la tranquillità, il tempo di centrarsi nel presente senza ossesionarsi con il futuro. Forse non c'è futuro, di sicuro non obbedisce ad un certo piano.
A volte sembra che le cose non possono andare meglio. Altre volte potrei assicurare che non possono andare peggio. Ma sempre è falso.

Sí, corteime o flequillo outra vez...

martedì, marzo 28, 2006

Le conocía sin conocerle sólo porque le espiaba. Y observándole por la noche y leyendo lo que escribía por el día creí estar más cerca de él aunque no le entendiese. Pero me gustaba, no sólo porque me gustaba su aspecto y porque siempre me sonreía, sino porque parecía interesante. Aunque me fui desencantando cuando descubrí que más que especial era directamente raro, sin eufemismos. No recuerdo cuando empezamos a hablar ni porqué de repente salíamos juntos, pero sí recuerdo la sensación que tenía de que estaba empezando una historia sin futuro, y de porqué esta vez tampoco me había dado cuenta hasta que se había hecho demasiado tarde.

venerdì, marzo 24, 2006


La cabeza no siempre se mantiene unida al cuerpo. En ocasiones, pesa demasiado y se cae. Entonces empieza a rodar y durante días permanece despegada. Hasta que las manos dan con ella y la colocan sobre el cuello y todo parece normalizarse. Pero nada vuelve a ser igual, las experiencias que han vivido cada una de las partes durante la separación impide que las cosas sean como antes. La cabeza soñará por siempre con recuperar su libertad.

martedì, marzo 21, 2006


Aquí nací yo aunque no siento que haya ningún vínculo que me una a esta pequeña ciudad porque nos fuimos cuando yo era demasiado pequeña como para que ningún recuerdo de infancia permanezca todavía hoy en mi mente.
Ayer fui de visita con una amigo y debo confesar que descubrí algún rincón encantador.
Extrañamente hoy no me invade ni un sentimiento de pesimismo fundado en la monotonía vital que rige el mundo ni uno de misantropía extrema; pausada en el lado positivo de la bipolaridad.

Life could have been very different but then,
something changed.
Stop asking questions that don't matter anyway.
Just give us a kiss to celebrate here today.
Something changed.

sabato, marzo 18, 2006


dime qué significan
estos espantos que me rodean.
cercado estoy de monstruos
que mudamente me preguntan,
igual, igual que yo les interrogo a ellos.

no me devoran.
devoran mi reposo anhelado,
me hacen ser una angustia que se desarrolla a sí misma.
dámaso alonso
siempre tiene que haber el típico bocazas que tiene que opinar de todo y de todos como si fuese una fuente natural de conocimiento, te juzga porque se cree que te conoce y le oigo hablar desde lejos viendo como vomita su prepotencia infundada porque es el único que no se da cuenta no sólo de que es idiota sino de que nadie diría que no lo es. y si procediésemos a la extinción de todos y cada uno de los imbéciles pero seguros de su inteligencia, sólo quedaría gente demasiado rara, porque nunca dejará de sorprenderme lo extraña que es alguna gente.

la semana que viene nos vamos de conciertazo, viva viva!
hoy no se permitió la celebración del macrobotellón en la plaza de anaya -natural- así que se trasladó la ceremonia al puente romano.
en poco tiempo llegaron la prensa salmantina y una cantidad indecente de policía -esa gente simpática a la par que apacible y razonable y que viven por y para el pueblo, especialmente para los estudiantes- y bueno, que nos echaron también.
yo ni siquiera llevaba alcohol, que había salido el jueves y a mi edad los excesos deben alternarse con los días relajados, pero estoy indignada por este ayuntamiento conservador que lo único que le preocupa es que su ciudad -culta y limpia- no salga en el telediario como una de las más pobladas en la escala de los botellones peninsulares. da igual estar a favor o en contra, el hecho es que en el río no hay casas ni vecinos a los que les disturbara el ruido y que prohibiendo beber en la calle no es que se fomenten unos hábitos más saludables, porque la gente bebe igual pero en otro lugar.
como le dijo su madre a un chico que yo me sé, hijo mío estoy viendo el telediario y la policía está yendo hacia el obradoiro así que si estás haciendo algo malo vete a casa ahora mismo.

mercoledì, marzo 08, 2006

El día internacional de la mujer trabajadora está vinculado a un incendio provocado en una fábrica textil de Nueva York en 1908, en el que murieron más de un centenar de mujeres que habían sido encerradas, y a la manifestación de empleadas del sector textil en dicha ciudad, que protestaban por los bajos salarios y las lamentables condiciones de trabajo, tras la cual fueron arrestadas y tratadas brutalmente por la policía.
En 1910 Copenaghe -un grupo de mujeres socialistas, se entiende- se une al movimiento estadounidense para reivindicar el sufragio universal femenino, dando origen a la celebración de este día.
La fecha elegida hace referencia también al año 1917 cuando mujeres rusas se amotinaron por la falta de alimentos y protestar por la guerra.

-siete de cada diez personas pobres son mujeres

En España:
-en igualdad de condiciones profesionales los salarios de las mujeres suelen ser un 25% más bajos que los de los hombres
-un millón de mujeres pero sólo doscientos mil hombres están contratados a tiempo parcial

lunedì, marzo 06, 2006

Definitivamente creo que soy ciclotímica. Paso del blanco al negro saltando por encima de los demás colores sin rozarlos.
Mi pasado se divide en períodos de dos tipos.
El primero es el tipo relajado, en el que ejerzo un inmaculado papel de niña buena, esos días en los que quedamos en casa para ver películas, vamos al cine, estudiamos y vamos a tomar claritas y poco más. Son los días en los que disfruto del olor de mi champú de cereza o de un tebeo. Aparentemente este tipo domina al otro.
El segundo tipo es bastante más alocado y cuando me encuentro inmersa en él caigo en el vicio de una manera bastante lamentable, o al menos, la niña buena que hay en mí tiende a escandalizarse.
Podemos decir que aquella noche se estaba llevando a cabo el proceso de transición del primer al segundo tipo, aunque creo que no se completó de manera radical, lo cual es bastante trágico porque me quedé levitando en tierra de nadie.
En un principio me resistí a beber, pero lo acabé haciendo. Tras un período de comportamiento angelical estaba algo desentrenada, pero a la vez confiada por la resistencia demostrada anteriormente, así que no tardé demasiado en estar más borracha de lo que deseaba. No recuerdo muy bien porque no me desperté en mi cuarto, sino en la habitación de dos chicos que la compartían, en la cama de quien podría definir como mi pareja por aquel entonces. Lo que puede parecer extraño o entrañable es que él había insistido en que le acompañase simplemente porque quería que durmiésemos juntos, y en contra de todo pronóstico me desperté rodeada por sus brazos. Por cierto, esa noche dormir juntos fue exactamente lo único que pasó, el alcohol despertó nuestro romanticismo mientras dormía nuestra líbido. Y después no sé qué sucedió, pero no tardamos mucho en romper y a ninguno de los dos le importó demasiado.

sabato, marzo 04, 2006


full of colours :-)

mercoledì, marzo 01, 2006

Fue hace algún tiempo. Las tres decidimos ser medianamente aventureras y marcharnos a un país en el que no hablaban nuestra lengua a buscar un trabajo temporal y un poco de emoción (otra cosa es que la encontrásemos). Se suponía que íbamos a ganar un montón de dinero y a perfeccionar lo que erróneamente creíamos que era un decente nivel de inglés.
Así que llegamos a la que se puede decir que, en nuestra opinión, es la capital más aburrida del mundo –que conozcamos- y empezamos a empobrecernos a pasos agigantados. Una habitación triple en un piso compartido lejísimos del centro, 300euros semanales. Un solo par de sábanas, que sospechábamos que ni siquiera habían lavado antes de que llegásemos, porque no olían bien. Hicimos un cálculo rápido de nuestro presupuesto. Podíamos gastar exactamente un euro al día, ni un céntimo más. El problema es que para poder caminar sin desfallecer hasta el centro y luego volver en lugar de pagar un autobús, teníamos que alimentarnos. Y claro, había que fotocopiar los CVs. Con tres euros al día no podíamos hacer mucho. Los primeros días comíamos sándwich con el pan de molde y el fiambre que menos mal que se nos ocurrió llevar. A veces nos permitíamos el lujazo de comprar plátanos o chocolatinas. Intentamos comer las latas de arroz con pollo que los españoles que habían estado allí antes que nosotras habían dejado, pero era mejor ayunar que ingerir aquella cosa.
Una semana dejando curricula por toda la ciudad y una sola entrevista fallida. Hasta que de repente encontramos el hotel. Y tuvimos una suerte impresionante porque allí acabamos trabajando las tres juntitas y luchando contra la opresión empresarial que ejercían sobre nosotras. En la entrevista dijimos que éramos expertas camareras. Pero no teníamos ni la menor idea y hasta teníamos dificultades para entender que lo que nos estaban pidiendo era “just a glass of water”. Así que tuvimos que aprender rápidamente, sin demasiados agobios porque lo peor que podía pasar era que nos echasen y volver a casa. Y nuestras jefas nos despreciaban no poco, pero nosotras tampoco éramos un ejemplo de sumisión jerárquica. No nos caracterizamos por nuestra dulzura y docilidad, para bien o para mal.
Tuvimos la dudosa fortuna de conocer el Tesco. Y empezamos a ampliar la lista de la compra. Pan de molde, leche y plátanos siempre. Té del Tesco. Azúcar usábamos la de T, pero luego le compramos un paquete. Mantequilla y mermelada. Arroz. Galletas de jengibre que picaban. Muslos de pollo por 2euros. Pimientos. Algún día compramos sidra y cerveza, qué exceso.
Era un poco lamentable tener diferentes turnos y vernos poco, no tener nada que hacer. Visitamos los museos, solas. Por la noche no podíamos salir, o al menos, no podíamos pagarnos una triste pinta.
De camino al trabajo, un día, vi a una de esas fruteras ambulantes que vendían una caja de fresas a un precio elevadísimo. Y yo las quería, terrible antojo que me atormentaba. Hasta llegué a soñar que podíamos pagarnos una de esas míseras cajas de tres fresas, una por cabeza.
Un día volví del trabajo, y claro, mis amigas no estaban. Estaba sólo M, que me dio, como de costumbre, nuestro correo, porque se había apoderado de la llave del buzón. Era uno de esos sobres que contenía un documento P+un número o pps o no me acuerdo, que venía siendo nuestra asistencia sanitaria. Y claro, los de mis amigas estaban bien, pero en el mío había un error y me descontarían el 50% de mi sueldo. Ni fresas ni agua del grifo. Así que me senté al lado del pobre M, que por qué no decirlo, a mí me parecía muy atractivo e interesante y me tenía fascinada, y empecé a quejarme durante un larguísimo período de tiempo en el que él escuchaba pacientemente nuestras miserias, sin prestar demasiada atención.
Y bueno, desde entonces S se dedicó a ver la tv de manera compulsiva, R a bajar la cabeza cuando le reñía la tía del piercing en la encía cuyo nombre no recuerdo y además me da igual, y yo a hablar con M, que me miraba con cara de póquer.
Un día volvió M del trabajo, muy guapo con su traje, y dijo que traía una cosa para mí. Y yo ya me imaginaba otra vez una de esas cartas burocráticas que me traían por el camino de la amargura, y sólo quería que me diese la santa carta para ir a reclamar mi dinero lo antes posible, y él jugaba “Guess” y bueno, yo le dije que no me marease con adivinanzas. Y de repente, tan lindo, sacó de su mochila un paquete de fresas.